jueves, 6 de marzo de 2014

OTRAS TEORIAS DE LAS NECESIDADES HUMANAS

AGNES HELLER
Desde otra perspectiva, historicista y dialéctica, cabe reseñar la categoría de necesidades establecida por Agnes Heller. Las necesidades se desarrollan, por contraposición a Maslow, por la continua superación de estadios históricos. La dialéctica de las contradicciones en cada contexto se supera por la transformación de la sociedad en nuevas etapas donde se lograrían satisfacer las necesidades plenamente, un «nuevo modo de vida» que supere de una vez por todas la estructura de las necesidades de la sociedad burguesa. La principal autora de la
Escuela de Budapest clasifica las necesidades según:
Necesidades existenciales: necesidades básicas tanto materiales como no materiales (fisiológicas y de sociabilidad).
Necesidades alienadas: de carácter cuantitativo, como la de poder, posesión, ambición y acumulación de riqueza.
Necesidades no alienadas: de carácter cualitativo, como las de amor, estima, amistad, actividad cultural, de desarrollo personal.
Necesidades radicales: generadas por el capitalismo, las necesidades radicales conllevan la necesaria superación del sistema capitalista, lo que implica una reestructuración global de la vida cotidiana en un sistema que genera necesidades a la vez que es incapaz de satisfacerlas («revolución de la vida cotidiana»).
Las necesidades según Heller «se refieren siempre a valores. Y son definibles sólo a partir de valores». Para Heller «sólo podemos considerar como necesidades aquéllas de las cuales somos conscientes», hay valores negativos (necesidades malas) que hay que superar, y valores positivos (necesidades buenas) que hay que alcanzar. Se constituye, por tanto, una jerarquía
de necesidades siempre relativas, ya que las necesidades universales se deben conseguir, pero sólo se pueden lograr tras una transformación revolucionaria del sistema capitalista. Las necesidades radicales cuya satisfacción conforma un definitivo estadio histórico, comportan una reestructuración universal de las necesidades y de los valores de un sistema en el que predominan las necesidades alienadas. Las necesidades radicales se expresan en términos de liberación como: la liberación del trabajo, la democratización de las instituciones, la mayor participación de los sujetos en las estructuras políticas y sociales.

Este modelo de necesidades planteado por Heller se contrapone con la establecida por Maslow y otros defensores una categorización de las necesidades fundamentada en una base de universalización de las necesidades humanas, y para ello asignan un sentido estratégico inherente para alcanzar su satisfacción.

TEORÍAS DE CLAYTON ALDERFER
Clayton Alderfer, llevó a cabo una revisión de la teoría de las necesidades de Maslow, la cual se convertiría en su teoría ERG; existencia, relación y crecimiento (growth, en inglés). La revisión efectuada por el autor tuvo como resultante la agrupación de las necesidades humanas en las tres categorías mencionadas y pasó a denominarse Teorías de Clayton Alderfer.
Teorías Existencia: Agrupa las necesidades mas básicas consideradas por Maslow como fisiológicas y de seguridad.
Relación: Estas necesidades requieren, para su satisfacción, de la interacción con otras personas, comprendiendo la necesidad social y el componente externo de la clasificación de estima efectuada por Maslow.
Crecimiento: Representado por el de crecimiento interno de las personas. Incluyen el componente interno de la clasificación de estima y la de autorrealización

TEORÍA DEL DESARROLLO GALTUNG Y WIRAK 
Estos autores plantean dos requisitos en la definición de las necesidades:
 a) deben referirse a una condición indispensable para la existencia del ser humano
 b) debe tratarse de condiciones necesarias para la existencia duradera de la sociedad.
Al igual que Maslow realizan una clasificación que va de necesidades más a menos elementales, pero su formulación es mucho menos exhaustiva. Distinguen pues, cuatro categorías, a saber:
- Necesidades de seguridad (individual y colectiva).
- Necesidades de bienestar (fisiológico, ecológico y sociocultural).
- Necesidades de libertad (de movilidad política, jurídica, de trabajo y deelección).
- Necesidades de identidad (en relación con un mismo, con la naturaleza, con la
sociedad).

  TEORÍA DE LAS NECESIDADES DE BRADSHAW


Desde la perspectiva en que se fundamentan los criterios valorativos de las necesidades, es  clásica la aportación de sobre las necesidades sociales de Bradshaw. Este autor hace una  clasificación cuatripartita:
- Necesidad normativa : los expertos o profesionales la percibe como necesidad en una  situación determinada. El criterio de estos informantes puede ser imprescindible en  muchos casos pero, a nuestro entender, no debe ser el exclusivo.
- Necesidad experimentada o sentida: es la necesidad percibida tanto individualmente como por los grupos o comunidades en que se organizan las personas. Es, por tanto,  subjetiva y fundamental si se trabaja desde un modelo de Servicios Sociales que  potencie el papel de los ciudadanos como sujetos protagonistas de los procesos de  cambio.
- Necesidad expresada o demandada: es la necesidad sentida puesta en acción mediante  una solicitud. A menudo este tipo de necesidad es la que condiciona la oferta de  respuestas sociales pero desde nuestro punto de vista y en el ámbito que nos ocupa, los  Servicios Sociales, la planificación no puede ir orientada sólo en función de la demanda.
- Necesidad comparada: es la deducida por el observador exterior en función de una  comparación entre una situación de la población objetivo y la de otro grupo con  circunstancias similares.

TEORÍA DE LAS NECESIDADES DE DOYAL Y GOUGH


 Probablemente sean estos autores británicos quienes han trabajado de un modo más ambicioso en la elaboración de una teoría universalista de las necesidades. Para ellos, las necesidades son concebidas como objetivos universalizables, no como motivaciones o impulsos.
Estos autores rechazan las concepciones naturalistas, relativistas y culturalistas de las necesidades. Las necesidades no pueden ser reducidas a deseos y preferencias regulados por el mercado. Afirman que las necesidades son históricas y socialmente construidas, pero que  también son universales. Frente a la idea de que cada sociedad tiene sus propias necesidades,  cambiantes en función de su estructura y organización social , Doyal y Gough sostienen que es
la forma de satisfacer tales necesidades lo que cambia, pero que hay ciertas necesidades básicas  universalizables para el desarrollo de una existencia digna. Sin el reconocimiento de tal  universalidad estaríamos ante la peligrosa situación de justificar como diferencias culturales lo  que son situaciones de privación objetiva, o a justificar las diferencias económicas entre los pueblos en términos de diferencias culturales relativas (relativismo cultural). Eso no implica un colonialismo cultural de los países desarrollados hacia los periféricos, sino la insoslayable tareaDoyal y Gough realizan una verdadera “propuesta de universalidad detrás de la que late un profundo sentido de redistribución de los recursos a nivel mundial y de organización de modos de satisfacción de necesidades que no supongan la explotación irracional de la naturaleza y de los recursos”.
 Doyal y Gough afirman la existencia de unas necesidades básicas que serían aquellas que cubren las condiciones previas universalizables para la participación social y la  persecución de fines propios, a saber: salud física y autonomía personal. La salud física obviamente es condición previa para emprender cualquier acción humana. La autonomía la definen como capacidad de acción; “capacidad de elegir opciones informadas sobre lo que hay que hacer y cómo llevarlo a cabo. Ello entraña ser capaz de formular objetivos y también
creencias sobre la forma de alcanzarlos, junto con la capacidad de valorar lo acertado de estas ideas a la luz de la evidencia empírica”. Este concepto encierra tres elementos fundamentales: el grado de comprensión que una persona tiene sobre sí misma, de su cultura y de lo que se espera de ella como individuo dentro de la misma (aprendizaje); la capacidad cognitiva y emocional del individuo (salud mental); y las oportunidades objetivas de acciones nuevas y significativas que
se abren ante los agentes ( Doyal y Gough, 1994).
Las necesidades intermedias son aquellas cuya superación mejora las condiciones básicas, por tanto se vertebrarán en torno a ellas. Aunque son más específicas, también son universales y transculturales y para satisfacerlas se utilizan medios o satisfactores concretos que ya sí están condicionados culturalmente y no son universales.
Las necesidades intermedias de supervivencia son las que se cubren con una alimentación adecuada y agua potable; con alojamientos que proporcionen seguridad adecuada; Las necesidades intermedias que mejoran las condiciones básicas de autonomía se cubrirían con una seguridad en la infancia; procurando unas relaciones de primer grados significativas; con la seguridad física y con la seguridad económica, enseñanza adecuada y seguridad en el control de natalidad, embarazo y parto.
Actualmente los planteamientos de Doyal y Gough están teniendo una influencia muy notoria  que se refleja en toda la literatura que se publica sobre el tema, sirviendo también sus reflexiones como referencia a programas internacionales tales como el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.

  HERBERT MARCUSE
Herbert MARCUSE (1972) recalcaba la diferencia entre necesidades  verdaderas y falsas siendo las primeras las que se explicitan socialmente sin ser inducidas por el  aparato mercantil-publicitario frente a las segundas, que serían precisamente las impuestas al individuo por intereses sociales particulares para su dominación.

 TEORÍA DE ANDER-EGG
Fundamentándose en la teoría de Vasasky, Ander-Egg presenta en su Diccionario de Trabajo  Social (1984) una clasificación de las necesidades en función del objeto de la necesidad o área  de carencia a que se refieren, sin entrar en su jerarquización; así distingue entre:
. Necesidades físicas u orgánicas: son aquellas cuya satisfacción permite gozar a los  hombres de niveles propios de su condición biológica.
. Necesidades económicas: hacen referencia a la presencia de seres humanos en
los procesos de producción y consumo. Estas necesidades están ligadas al nivel
productivo de la vida humana.
. Necesidades sociales: se refieren a la manera como los seres humanos se  relacionan entre sí, en el nivel familiar, con amigos u otras personas.
. Necesidades culturales: se relacionan con los procesos de autorrealización y  expresión creativa. Se nutren, principalmente, en las manifestaciones del
conocimiento, de la creación artística y de actividades lúdicas.
. Necesidades políticas: se refieren a la inserción de los seres humanos en las
relaciones de poder y la vida ciudadana en general.
. Necesidades espirituales y religiosas: son aquellas que buscan dar sentido,
significación y profundización a la vida en relación con la trascendencia.
Fuentes:
http://es.wikipedia.org/wiki/Teor%C3%ADas_de_Clayton_Alderfer
http://www4.ujaen.es/~aespadas/TEMA2.pdf
http://congresos.um.es/ahha/ahha2009/paper/viewFile/6331/6071
http://www.filo.unt.edu.ar/al/its13/u2_necesidades.pdf 

1 comentario:

  1. Excelente compendio de definiciones Mónica, congratulaciones muy completo tu Blog. De esta manera, en cada definicion que desarrollas resaltas que son propias de los seres humanos y se comportan como sensaciones de carencia, y que van unida al deseo de satisfacerlas.

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